De las adversidades hay que sacar provecho

       

          Está visto que de todo tenemos que sacar el lado bueno. El pasado mes de Diciembre, después de un mes planeando pasar un día por la Mariña de Lugo, Mirando la tabla de mareas, consultando la previsión del tiempo, etc. elijo el día y ahí que me voy. Día radiante en la salida, pero... cuando cruzo la frontera de Lugo... el día radiante se convierte en gris, mal empezamos. Llego a la Playa de las Catedrales y a la hora de la baja mar, el mar no baja, pero que pasa, todo se pone en mi contra. Hablo con un señor que parecía de la zona y me dice que la marea de hoy en su bajamar es la más alta del año. ¿Pero que pasa?. Me armo de paciencia y ya que estamos pues vamos a aprovechar el día. después de media hora paseando por donde se podía. Entablo conversación con dos chicas que estaban en la misma tesitura que yo y nos ponemos a hacer fotos. ¡¡Dios!! se me estropea una de las cámaras, pero que pasa hoy... .

          Ante todas estas adversidades, ya no sé que hacer. Una de las chicas me dice: ¿has ido por la otra parte?, yo no sabía que había otra parte, todo vamos a los arcos que salen en todas las fotos. Pues haya que me voy. Esta claro que no tiene la espectacularidad de los arcos de piedra simulando los arbotantes de las catedrales, pero podemos observar lo que le pasará a los arcos dentro de muchos años cuando mar haciendo su lento trabajo de erosión, los desgaste hasta que colapsen.

          Volviendo a las fotos, la verdad es que este cúmulo de adversidades me ha dado otra perspectiva de la playa de la Catedrales, quizás menos espectacular, pero diferente y haciendo incapie en los colores de la roca, en los colores de los diferentes estratos y en la manera en la que el mar golpea la roca. En unos desfiladeros que en algún momento me recordaron a los desérticos del Siq.

          Os dejo una muestra de las fotos que hice ese "fatídico" día y que si bien en el momento no me hicieron especial ilusión, después en casa al tratarlas y ahora al publicarlas me hacen pensar que a veces de la adversidad se saca provecho.

                                                                          Moncho ... para los amigos.